-He tomado una decisión ¿sabes? Me he cansado de intentar entenderte o que me entiendas. Así que voy ha aceptar lo que quieras entregarme sin preguntas, sin rayadas, sin más. Si quieres estar conmigo bien y si no también. Tu decides, como has hecho siempre, pero ahora, con mi consentimiento.
En ese momento sonó el timbre y Lucía volvió completamente a la realidad. Abrió la puerta con una sonrisa.
-Pasa Diego, pasa. Me alegro de que me hayas llamado.
Lastima que Diego nunca vaya a escuchar el discurso que Lucía tenía preparado, como siempre ella es incapaz de decir lo que tiene en la cabeza.
Suele pasar, tenemos claro lo que pensamos y lo que queremos decir, estamos totalmente seguros... pero a la hora de la verdad... dejar las cosas claras, cuesta.
ResponderEliminarbesitos
Me solía pasar.. me SOLÍA.
ResponderEliminarYa, por suerte, tengo bien aprendido que es mejor ir con la verdad por delante y decir siempre lo que se piensa.
Ojalá Lucía aprenda :)
Besitos gorditos :)
de todas formas, el hubiese seguido siendo el mismo, no?.
ResponderEliminarclaro, de todas formas ella necesitaba decirlo.
un saludo en la lejania.
uuh, pues muy mal, debemos ser valientes y afrontar las cosas!!
ResponderEliminarLucia deberia decirle todo lo que piensa.
Un besoo
Eso siempre pasa... u.u''
ResponderEliminarpero hay que ser valiente y decirle lo que piensas, y decir lo que piensas! =)
Besos desde Francia
woow no tienes idea de como me siento identificada...
ResponderEliminares totalmente típico, en especial cuando es algo que llevas mucho tiempo guardandote y siempre que quieres decirlo no lo dices.
y claro, piensas ''la proxima lo hago SI o SI...'' pero sabes que no es cierto.
besos! (:
Uff, a mí eso me pasa muchas veces y me odio por no poder evitarlo.
ResponderEliminarUn muá(h) y un sugu de cereza!
Como la vida misma, sigh...
ResponderEliminarHay dios me encanta! Además es perfecto...yo me llamo Lucía y mi gran amor Diego jaja y me pasa algo parecido...un blog GENIAL (LL)
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