Parte de ellos...

día 71

Siempre me gustó todo lo que guardas debajo de tu cama. Creo que nunca llegue a decírtelo, pero es así. Me encantan tus pequeños sueños arrugados, bien porque cambiaste de opinión, bien por que no dieron resultado. Tus momentos de debilidad en los que derramaste alguna lágrima, que ya somos mayorcitos los dos como para saber que los escondes ahí porque por un lado te avergüenzas, pero por otro no quieres olvidarlos. La historia de tu vida escrita en tercera persona, en aquel cuaderno roñoso, no vaya a ser que si usases la primera te diera por tomarte la vida en serio. Todos los monstruos que matastes a los demás, porque hay veces que eres un autentico superheroe, pero no de los de las películas, y los que esperan a que alguien los asesine por ti. Un montón de besos bajo la lluvia, con un montón de chicas distintas que tú te empeñabas en decir que no eran importantes y yo siempre me pregunte: entonces ¿por qué los guardas? Y, sobre todo, aquel billete de ida al fin del mundo, para irme a buscar donde quiera que fuera cuando a mí me diera por salir huyendo.
Lastima que no lo usases nunca.

5 comentarios:

  1. Es increible la de cosas que acaban debajo de la cama.

    Besos

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  2. debajo de la cama pueden encontrarse cosas tan olvidadas, como el primer amor

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  3. Yo quiero tener una cama así y un cuaderno realmente roñoso, que abarque muchas absurdas historias.

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  4. "lástima que no lo usases nunca". una pequeña e increíble pincelada que lo convierte en un gran final, porque el texto es magnífico.

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