-Noli, ¿puedo preguntarte algo?
-Claro. -contestó con una sonrisa.- Que no quiere decir que vaya a responderlo.
-Mira, has tenido suerte, esa es una de las preguntas que si que tienen respuesta.- dijo riéndose.- Porque, si supiera como te llamas, el día que salgas corriendo podría buscarte, podría obsesionarme y no dejar de pensar en ti. Sin embargo si no se tu nombre ¿cómo me voy a obsesionar con algo que ni si quiera puedo nombrar?
-Y, ¿por qué iba yo a salir corriendo?
-A mí no me lo preguntes.- dijo Noli encogiéndose de hombros.- Yo solo sé que todos lo hacen.
Jaja, Que Noli.
ResponderEliminar¿Qué pasará si este no sale corriendo?
ResponderEliminarBesos
:S todos/as no deberian de salir corriendo, seguro que el chico es muy mono...
ResponderEliminarOye pues la verdad es que es una buena solución, ojalá y se le pudiese quitar el nombre a muchas cosas...
ResponderEliminarmuaacks! :)
cambios en mi blog!
ResponderEliminarYo a partirr de ahora optaré por hacer eso...lo cierto es que una se ahorra muchas comidas de olla!^^genial el relato!!un beso!
ResponderEliminarAunque no revele su nombre ella lo buscará si sale corriendo, pobre ilusa. . .
ResponderEliminarEs cierto, si no supieramos el nombre de ciertas cosas nos ahorrariamos tantos disgustos...
ResponderEliminarMuy buena :) Unbesazo!
su ultima pregunta es de esas que no tienen respuesta..
ResponderEliminarun saludo en la lejania.
Noli me recuerda a mi, en ciertos aspectos jaja
ResponderEliminarPues sí... cuánta razón tienes. Todo el mundo acaba así :S
ResponderEliminarCurioso...
ResponderEliminar;)
La próxima vez que conozca a un tío no le preguntaré su novio, quizás me ayude a no sufrir por él... Te sigo ^^
ResponderEliminar:o
ResponderEliminar